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jueves, 28 de julio de 2011

¿Qué nos ha quedado de aquella Chapina?

Con vistas a la Exposición Universal que se celebraría en 1992, la clase política estimó en cambiar Sevilla, adecuándola a unas nuevas necesidades generadas en parte por el reciente aumento de superficie y poblacional. También había que ofrecer una nueva imagen a los visitantes y una expectativa cara al futuro. Las zonas de Torneo y Chapina, siempre en el límite virtual y aparentemente a la espalda del resto, debían ser estructuradas y absorbidas por el resto del entorno. Por tanto, se reabrió el cauce del río, que estuvo taponado desde principios de los años 50. Una consecuencia fue que la piqueta acabó con las instalaciones deportivas de Chapina, construidas en la década prodigiosa. La calle Torneo fue ampliada en carriles para el tráfico, aliviando de manera considerable los atascos que se formaban en las horas punta, y fue acondicionada mediante un paseo ribereño. El dogal ferroviario, fue destruido. Se conservó la estructura de la Estación de Córdoba, mientras que a su lado se elevó la nueva central de autobuses de Plaza de Armas, cerrándose las antiguas cocheras como las del Barranco y la de la calle Marqués de Paradas. Si bien en este blog ya hemos tratado con profusión sobre los cambios en Torneo y la estación de autobuses, nuestro propósito enfila sus miras hacia los Jardines de Chapina de entonces.

En 1950 como parte de la protección del puerto ante las posibles riadas, se cegó el cauce histórico del río en Chapina (conocida bajo ese nombre desde 1859), punto clave del equilibrio entre la ciudad y el río y el paso de éste por el ferrocarril y la red de carreteras. En 1959 se destruye el viejo puente de tablas. En la imagen de abajo, sección del plano de 1974 apreciándose la corta del río en Chapina:
Con la construcción de la corta de la Cartuja, el dispositivo defensivo del puerto que era Chapina, así como el muro del margen izquierdo de San Jerónimo, podrían ser desmantelados, al perder su función en el nuevo sistema de defensa. El Ayuntamiento de Sevilla encargó en 1982 un anteproyecto de reapertura del cauce y ordenación de Chapina. En 1985 la Consejería de Obras Públicas realizó los estudios de la viabilidad de la obra y del trazado del cauce, y, posteriormente, encargó el proyecto del puente que sustituiría el enlace viario existente sobre el rellano.

En 1965 la corta se comenzó a adecentar debidamente por ambos márgenes, llegándose a generar una fauna y flora propias. Mientras, en el margen Oeste, en 1965 se inauguraron las instalaciones polideportivas de Chapina. Abajo, almanaque de 1978 que por el reverso mostraba el como fue la zona chapinera hasta 1989, año en que se deshizo la corta. Sobre la enorme explanada existente entonces hemos dibujado la palabra fútbol, y es que, por aquellos años, los sábados por la mañana casualmente se organizaban pachangas y partiditos. En la actualidad y desde 1992 aquella zona quedó reducida prácticamente a la mitad. En la parte de abajo la carretera para Huelva:


Por aquellos tiempos, Chapina fue lugar no sólo de balompié improvisado, sino también de prostitución y droga transitoria, de homosexualidad encubierta y de parejas adolescentes. En los jardines de arriba (en la parte izquierda de la foto de arriba), en los que se bajaba de forma escalonada hacia la explanada, también se jugaba al balón sin que hubiera leyes que lo prohibiera. Un espacio que nunca fue publicitado para su uso, por lo que a muchos nos causaba una impresión paradisíaca, que en nuestros días puede parecer impensable debido no sólo al carril-bici, sino también a la masificación del lugar. Abajo, desde la parte trianera de Chapina que comunicaba al parque a través de la pasarela que vemos. También aparece una vista del arbolado que a modo de terraplén ponía fin a los jardines: al fondo Plaza de Armas. La fotografía pertenece al libro de Joaquín Arbide " Sevilla en la retina", y está tomada en 1986:



En la zona Oeste, como dijimos anteriormente, se construyeron a mediados de la década de los 60 las instalaciones polideportivas. En su momento fueron importantes para la ciudad, puesto que incluían una enorme piscina pública de carácter olímpico, así como también pista de atletismo con gradas incluidas. En 1968 fueron escenario de la marcha de la antorcha olímpica hacia los Juegos Olímpicos de México 68. La primera perspectiva de abajo nos enseña una visión aérea del polideportivo con la piscina a su derecha:


A continuación, momento del pebetero olímpico en 1968, en la parte de Triana, en une extremo de Chapina. Coincidió con la primera urbanización del Paseo de la O. El ambiente, claramente intimista con poco público y mucho espacio. Ese marco era el hasta finales de la década de los 80 podíamos disfrutar. Posiblemente, en la parte de atrás del público sentado en la foto, a la derecha, se hallaría un tradicional edificio de 1929 que vemos en la siguiente imagen, cuya fachada intentó salvarse mediante contrafuertes una vez que derribó parte de la casa, aunque la fachada finalmente se perdió. En los 70 y 80, parte de la construcción en su derecha, fueron clubes de alterne y whisquerías. Actualmente, ya con otra estética, es el Hotel ABBA-Triana.



Casi al lado del  Puente de Triana, abajo, el Barranco, en 1973 antes de su primera restauración. En el 70 dejó de ser lonja del pescado. Las Naves del Barranco en Sevilla, construcción de hierro y cristal de bóvedas de cañón, diseñadas por el ingeniero Eiffel y encargadas en 1876 a la fundición sevillana Portilla y White, Cía., han sido punto de información turística, sala de exposiciones y albergue improvisado de indigentes y de ser propuesto para sede de la televisión municipal y para un centro de interpretación de la Semana Santa. Han visto pasar multitud de proyectos, porque al parecer los gobernantes desconocen el concepto de dejar las cosas tranquilas como el edificio de la izquierda del Barranco. Desde los 90 es camino de la terraza Capote, escaleras abajo.


 Con la destrucción del tapón de Chapina cuyos jardines han quedado menguados de forma ostensible, de la piscina y el complejo deportivo, finalizaron casi 30 años en la zona de una ciudad que al entrar en los 90 y en  la globalización se perdió el punto intimista -salvo fechas y lugares puntuales- que reinó durante generaciones enteras. 


8 comentarios:

  1. Jorge Luis Ortiz Temes, dijo:

    Con lo de "década prodigiosa" no se realmente a que te refieres...pero creo recordar que en tiempos del "Tito Paco" se acometieron varias atrocidades urbanísticas y defunciones artísticas en Sevilla de imposible reparación...destrucción de toda la Plaza del Duque y de sus palacios, ensanche de la calle Imagen y destrucción de toda esta zona, construcciones de tal fealdad que parecen fetos malparidos en pleno Casco Histórico y pérdida de edificios de valor incalculabe...todo ello con el beneplácito del catedrátido de Arte Don Hernández Díaz que era el encargado de urbanismo...

    Lo cual dice mucho de la inteligencia de estos "franquistas"...yo los comparo con los médicos de los campos de concentración nazis, más que curar, asesinaban...un catedrático de Arte destructor de Arte como el Hernández Díaz debería ser despojado de todos sus títulos...que ya no valen nada...pero estos tipos ya están bajo una gran losa...es lo bueno...

    El tapón de Chapina fue un remiendo y chapuza para evitar las inundaciones en Sevilla, que supuso el corte del paso del cauce natural del Guadalquivir por delante de la ciudad como ha sido siempre, dejando una "darsena" que no era más que una cloaca de aguas estancadas, una especie de piscineta tipo Plaza España...

    Toda esa obra que se hizo en el 92 permitió recuperar el discurso del cauce del Río como avenida principal de SEVILLA...de forma natural como ha sido siempre y además evitando inundaciones...una obra muy buena de ingeniería que devolvía a la Naturaleza su normalidad...

    Lo que si duele es que en Sevilla no haya más instalaciones deportivas como las que había en Chapina...pues una ciudad con 40ºC a la sombra durante 3 meses del año merece una piscina pública en cada barrio...

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  2. Jorge, no puedo estar más de acuerdo en todo lo que aludes sobre los crímenes urbanísticos, la apertura del río y la necesidad de piscinas públicas.

    Eso sí, puntualizarte que "la década prodigiosa" es una frase habitual que se suele usar en referencia a los años de 1960.

    Date cuenta que en este reportaje no se compara mediante un análisis concienzudo si un tiempo determinado fue mejor o peor, sino que se trata de recordar espacios que existieron en la infancia y adolescencia de nuestras vidas. Eso sí, si te fijas suelo referirme con vehemencia a la pérdida de la intimidad que por aquel entonces gozábamos los de nuestra generación.

    Un saludo.

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  3. El número 14 correspondía a una casa de vecinos, algunos inolvidables como Isabel, una mujer muy trabajadora que tenía un porrón de hijos, todos mudos.Mi familia vivió muchos años en la casa Accesoria a ese 14, me hubiera gustado haber hecho en su momento fotos del lugar, pero ya es tarde, tardísimo, pues ya no existe nada.

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    1. Efectivamente, Montse. Si la tecnología-precio del material fotográfico hubiera existido por aquel entonces como vemos actualmente, el asunto de las imágenes hubiera sido distinto. Ahí estamos buscando fotografías de un lado para otro, con resultados, en la mayoría de las veces, infructuosos.

      Gracias por tu comentario.

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  4. Bueno, "doble agradecimiento" por tu escrito, ya que el pseudónimo "Cultura Sevillana" también es el mío. Un saludo.

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  5. pues yo poseo un escrito de la fundacion gonzalo queipo de llano que es un concurso para distribcion de tierras de regadio en la isla mayor del guadalquivir fechado en sevilla a 15 de marzo de 1945 con 10 puntos a que habia qe atenerse para obtener terreno de regadio de unas 150 hectareas que se repartian.

    si le interesa a algien le mando el escaneo o el original habiendo peticion de atoridad competente de archivo u otro organismo que me lo pida.

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    1. Estimado Anónimo: Le recomiendo que contacte con el Archivo Histórico Provincial, seguramente se sentirían agradecidos por su aportación con ese documento. Un saludo.

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    2. lo hare con mucho gusto...

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